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Publicado: Lunes, 23 Mayo 2022 12:11
“En mi casa somos cinco. Mamá, papá, mi hermano, el perro y el gato”, le respondió un nene de cinco años al censista cuando escuchó que preguntabacuántos integrantes conforman su familia. “Me parece una falta total de consideración que no incluyan a losanimales de compañíaen elcenso. Son parte del hogar y cuesta mucho mantenerlos”, se queja una de las tantas internautas que descargó su furia en la red social del pajarito por lainvisibilización de los peludos de cuatro patasen el cuestionario.
La experiencia de Sandra Mercado fue diferente. Cuando la interrogaron sobre las edades de los seis integrantes de su grupo familiar, dudó si todos eran mayores de edad. "Ponele que tres son menores, pero calculamos que la perra es adulta porque ya tiene 12 años", señaló ante la perplejidad del censista. Y le pidió que anotara“familia multiespecie”, indicándole que entre paréntesis podía aclarar en puño y letra que se trataba dedos humanos y de cuatro inhumanos(tres perros y un gato).
De acuerdo a la última Encuesta Anual de Hogares del año 2018, sólo en los hogares de la Ciudad de Buenos Aires conviven 475.000 perros y 295.000 gatos, por lo que se estima queuno de cada dos hogares tiene mascota. La cantidad de perros se incrementó en un 10,4% entre 2014 y 2018 y en un 18% la población felina, según datos de Mascotas de la Ciudad.
En 2016, la Autoridad la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) realizó un trabajo territorial para evaluar la situación ambiental de la zona. Tomó como muestra representativa los municipios de Avellaneda, Merlo, San Vicente, Cañuelas y La Matanza. Encontró que habíaun animal de compañía cada tres habitantes.
¿Por qué no se mide esta variable que es clave en muchos hogares?“No tenemos registros en otros censos del mundo sobre el tema de mascotas. Habría que estudiarlo. Es un tema para debatir, al igual que tantas otras preguntas que se podrían incluir. No es una temática para reflexionar hoy sino quepodría discutirse para incorporar en el 2030”, responden desde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) ante la consulta deClarín.
Para Elena Liberatori, titular del Juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario Nº 4 de la Ciudad de Buenos Aires, sería interesante la inclusión de esta temática. “El relevamiento que se realizó esta semana estuvo focalizado en cuestiones habitacionales y sociales, perono se indagó sobre la convivencia con seres sintientesy el censo muestra la cotidianeidad de nuestras vidas”, señala la magistrada a este diario y omite el término mascota porque tiende a cosificar.
Liberatori fue la jueza que, en 2015, reconoció por primera vez en el mundo como persona no humana a un animal:la orangutana Sandra, que cuatro años después dejó elZoo porteño.
“Al igual que con la identidad,uno puede autopercibirse como una familia multiespecie, lo cual permitiría implementar políticas que impliquen a los compañeros no humanos. Por ejemplo, tutorías responsables para que no sean abandonados o resolver situaciones de las personas en situación de calle que no pueden ingresar a pernoctar en un parador con su perro que, muchas veces, essu único lazo afectivo. Hay disfuncionalidades institucionales en la asistencia social a quienes tienen vulnerabilidad porque no se tienen en cuenta estas problemáticas”, describe la jueza.
En la misma tónica, Andrés Gil Domínguez, representante legal de la Asociación de Funcionarios y Abogados por los Derechos de los Animales (AFADA), plantea quedeberían estar incluidos porque son sujetos de derechocon facultades que deben ser contempladas aunque nuestro Código Civil y Comercial los considere cosas.
“Contar con este relevamiento serviría paradiagramar políticas públicas respecto de los animales no humanos domésticos. Como eje fundamental sería necesario que el Estado ofrezca atención primaria, vacunación y esterilización, y brinde educación en derechos animales para que no sufran más violencia”, contempla.
“Deberían censarse para visualizar la evolución de las familias multiespecie en Argentina y comprender la densidad de las distintas especies en el país.Hoy, gran parte del gasto mensual de un hogar se destina a los animales”, reflexiona Melisa González Trajtman, Marketing Manager de Vitalcan, quien cree que los animales se consideran de la familia porque "hay pautas de crianza que involucran el cuidado integral de la salud, elección adecuada de alimentación, recreación conjunta y otros gastos que integran su presupuesto".
Familia multiespecie y seres sintientes
El concepto de familia multiespecie se originó en un fallo judicial a raíz del proceso contra un policía deChubutpor el asesinato de la perra Tita, en marzo de 2019. El juez Gustavo Daniel Castro determinó quelos dueños del animal eran padre y madre de esta perra mestiza asesinada por un oficial de policía mientras aplicaba restricciones basadas en la cuarentena impuesta por la pandemia de Covid.
Así, consideró a “Tita” como“una persona no humana”y reconoció que forman una “familia multiespecie” debido a la integración del can (y otras tres mascotas) a la vida cotidiana familiar. “El animal ya no es una cosa sinoun ser sintiente y con el derecho a que se le respetela vida”, fundamentó.
Lasintienciaes un concepto científico que paulatinamente se va incorporando a las normas jurídicas. Proviene de la Declaración de Cambridge sobre la Conciencia, de 2012, según la cual las estructuras neurobiológicas que hacen que los humanos tengamos dolor, tristeza o felicidad sonlas mismas que tienen los animales.
La orangutana Sandrafue el primer animal en todo el mundo cuyos derechos fueron reconocidos legalmente. En 2015, la jueza Liberatori la declarópersona no humana y ordenó al zoológico de Buenos Aires que la liberase. Hoy, Sandra reside en el Center of Great Apes (Centro para Grandes Simios) en Florida (Estados Unidos).
"Considerar a Sandra como sujeto de derecho implica directamente quesu cautiverio y exhibición pública como objeto circense violan los derechosque ella titulariza por más que la alimenten, no la maltraten o la sometan a actos de crueldad", explica Gil Domínguez.
“La sintiencia da lugar a que los humanos reconozcamos a los animales como sujetos de derecho. Nos está hablando deuna sensibilidad nueva, generalizada en la sociedad, que necesitamos para propiciar los cambios legislativos para que exista una conciencia social que motorice las acciones judiciales”, plantea Liberatori.
Estatuto jurídico
En nuestro régimen legal, los animales están pensados por el Código Civil y comercial entérminos de objetoy, por ende, sometidos alrégimen de propiedad. Sin embargo, empieza a existir jurisprudencia como el caso de Sandra o dela chimpancé Cecilia, liberada en Mendoza gracias a un hábeas corpus, quecuestiona la noción de animal objeto.
“Por un lado, existe legislación que considera a los animales como seres sintientes y por el otro, decisiones judiciales que empiezan a considerarlos como sujetos o personas no humanas. Es necesariodeconstruir el eje antropocéntricopara hacer normas donde la naturaleza sea el centro", explica Valeria Berros, abogada e investigadora adjunta del Conicet.
Principalmente, en regímenes legales europeos se piensa en los animales como seres sensibles, sintientes y se tienden a cambiar las normas hacia ese marco. De hecho, en España,los animales de compañía tienen un estatuto jurídicodiferente al de los bienes materiales porque son considerados "seres vivos dotados de sensibilidad" y no cosas, y se les confiereuna consideración de miembros de la familia.
La propuesta de "descosificación" de los animales se suma a cambios legislativos aprobados en otros países como Austria, Alemania, Suiza, Bélgica, Francia, Canadá y Nueva Zelanda.
Como inmortalizó el filósofo francés Jacques Derrida: “Las relaciones entre los hombres y los animales deberán cambiar”.
Fuente: Penélope Canonico - Clarin.com
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Publicado: Viernes, 20 Mayo 2022 11:46
Buenos Aires - La triquinosis o trichinellosis es una enfermedad parasitaria endémica. Es causada por larvas de nematodes del género Trichinella, que afectan al ser humano, mamíferos domésticos, silvestres, aves y reptiles. Se trata de una zoonosis que se transmite a las personas de modo accidental, por la ingestión de carne o derivados cárnicos, crudos o mal cocidos, que contienen estas larvas en los músculos.
En Argentina, la principal fuente de infección para el ser humano es el cerdo doméstico, aunque también existen otras, como el jabalí, cerdos asilvestrados o el puma.
Con respecto a los cerdos domésticos, la parasitosis está estrictamente relacionada a las condiciones de su crianza, especialmente con la alimentación y presencia de animales sinantrópicos (por ejemplo, ratas) en el criadero o en basurales cercanos y hábitos canibalísticos del cerdo.
La trichinellosis es considerada una enfermedad de notificación obligatoria establecida por la normativa oficial. El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), a través de la Coordinación General de Epidemiología y el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Animales, establece las maneras de atender las notificaciones de la enfermedad, el registro de sospechas, focos y brotes.
Ciclo de transmisión
Si bien el cerdo es quien se encuentra involucrado con mayor frecuencia en la ocurrencia de casos humanos, también se registran brotes originados por el consumo de carnes de animales silvestres –generalmente en forma de chacinados y embutidos sin control bromatológico o de carne fresca insuficientemente cocida–.
En nuestro país, los hábitos de crianza de cerdos en forma domiciliaria (traspatio) sin las condiciones adecuadas de higiene y alimentación propician la propagación y el mantenimiento de esta parasitosis. Esto se asocia, a su vez, con la faena domiciliaria o casera sin control sanitario, que trae como consecuencia la oferta de alimentos de riesgo para quienes los consumen (carne curada, ahumada, cruda o insuficientemente cocida).
Las personas se enferman al consumir carne cruda o insuficientemente cocida o productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres, principalmente jabalíes y pumas, que contienen en sus músculos larvas de parásitos del género Trichinella. Por eso, es también considerada una enfermedad transmitida por alimentos (ETA).
Una vez que las personas ingieren productos parasitados, las larvas se liberan en el estómago, continúan su ciclo en el intestino y luego de reproducirse, migran por el torrente sanguíneo hacia los músculos, donde se alojan y pueden provocar fiebre, diarrea, hinchazón de párpados, vómitos, picazón en la piel, dolores y dificultades motrices.
Esta enfermedad tiene un fuerte impacto en la salud humana. El cuadro clínico es muy variable y puede ir desde una afección asintomática hasta cuadros más graves, dependiendo del número de larvas ingeridas y del estado inmunológico del huésped.
Prevención
- El consumo de alimentos
A la hora de consumir productos porcinos y derivados es preciso tener en cuenta una serie de precauciones para prevenir el contagio de la triquinosis. Los chacinados, embutidos y salazones se elaboran con carnes sin cocción, por eso, los productos resultantes pueden contener larvas de los parásitos que producen triquinosis.
Para evitar contraer la enfermedad es importante que las personas solo obtengan estos productos en establecimientos habilitados y no en lugares informales en los que no se puede demostrar la inocuidad y la trazabilidad del producto adquirido. Asimismo, se recomienda a las personas adquirir productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres (principalmente de jabalíes y pumas) que posean una etiqueta o rótulo, ya que nos permite conocer su origen y dónde fueron elaborados.
De acuerdo a la normativa vigente, los establecimientos habilitados deben analizar la carne antes de utilizarla en la elaboración de productos, de manera de poder garantizar que son aptos para consumo humano. En este mismo sentido, es importante resaltar que la cocción de la carne de cerdo se debe realizar hasta que pierda el color rosado en su interior, ya que este punto nos indica que se alcanzó una temperatura que mata las larvas que transmiten la enfermedad (mayor a 70 grados Celcius).
Para mayor seguridad, se debe consumir carne de animales que hayan dado negativo a la prueba de digestión artificial.
La producción
-Técnica de digestión artificial
Las personas que elaboren chacinados (como chorizo seco, salame y longaniza), a partir de carne cruda de cerdos o de animales silvestres, deben verificar previamente que esta materia prima sea apta para consumo humano. Para ello, deben remitir una muestra de carne de cada animal (entraña) con el objetivo de que sea analizada en un laboratorio mediante la prueba de digestión artificial, que es la técnica aprobada para detectar larvas de Trichinella spp y poder liberar carnes al consumo.
En Argentina hay laboratorios ubicados en distintos puntos del del país a los cuales las personas pueden recurrir ya que están destinados a la atención de los requerimientos propios de cada región.
- La caza
En ciertas zonas de la Argentina se realizan actividades de caza, como en la Patagonia, las provincias de Buenos Aires, Córdoba y La Pampa, entre otras; en muchos de estos casos, los cazadores elaboran chacinados o salazones con carne de puma, jabalí u otros animales silvestres que pueden contener larvas y también suelen mezclar la carne con cortes de cerdos domésticos y de otros animales. Por tal motivo, quienes se dedican a esta actividad deben someter sus muestras, previamente, a la prueba de la digestión artificial; así como recordar que no deben abandonar las carcazas, ni utilizarlas como alimento para los cerdos domésticos.
Acciones del Senasa
- Inscripción de unidades de producción porcina y habilitación de laboratorios
La Resolución 423/2014 establece que la inscripción en el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (Renspa) es obligatoria y gratuita para quienes se dedican a la producción pecuaria en el país –con independencia de la cantidad de animales que posean, del título por el cual detentan la tierra en que desarrollan su actividad y cualquiera sea el sistema de producción utilizado–.
Por otro lado, el Senasa realiza la habilitación de laboratorios pertenecientes a la Red Nacional de su Dirección General de Laboratorios y Control Técnico. Muchos de estos efectúan la prueba de digestión artificial, técnica necesaria para detectar larvas de Trichinella spp. Ante cualquier duda por este tema, las personas interesadas pueden comunicarse al correo electrónico Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..
Recepción y atención de notificaciones
El Senasa recibe comunicaciones de casos humanos y animales positivos a la digestión artificial por parte del Ministerio de Salud de la Nación, de los ministerios de Salud provinciales, de los ministerios del agro, laboratorios privados, municipales y/o provinciales, también de frigoríficos con y sin habilitación del Senasa. Por otra parte, cualquier persona responsable o interesada puede notificar la sospecha de una enfermedad detectada en animales, a través de los siguientes canales:
• En las oficinas del Senasa –comunicándose personalmente o por teléfono–.
• A través de la app “Notificaciones Senasa”, disponible en Play Store.
• Enviando un correo a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
La actuación inmediata permite minimizar las consecuencias, optimizar la intervención y controlar enfermedades antes de que se diseminen. Se recuerda que se puede solicitar información pública a través de nuestro portal web. Ante la notificación de una sospecha de triquinosis, el Senasa lleva a cabo las investigaciones epidemiológicas necesarias para determinar el origen del foco y realizar las acciones correspondientes que establece la normativa vigente.
Al cumplir con las pautas que brinda el Senasa para la crianza de cerdos y la elaboración de productos alimenticios, los productores porcinos y los cazadores colaboran con la prevención de la triquinosis, protegen su actividad productiva, evitan riesgos y producen alimentos seguros.
Para más información, las personas interesadas pueden comunicarse al correo electrónico Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Fuente: Agrositio.com.ar